La kazaja Elena Rybakina conquistó el Abierto de Italia el sábado, cuando su rival ucraniana Anhelina Kalinina se retiró por una lesión en el muslo izquierdo al comienzo del segundo set de una final demorada por la lluvia.
Rybakina ganaba por 6-4, 1-0, 15-0, cuando Kalinina solicitó la ayuda de un kinesiólogo y se sujetó la pierna izquierda. Entre lágrimas, decidió que no podía continuar.
La final comenzó casi a las 11 de la noche del sábado y terminó en los primeros minutos del domingo.
“Lamento de verdad no poder jugar”, dijo Kalinina durante la ceremonia de premiación.
El público había silbado su determinación tras esperar horas bajo la lluvia antes de que comenzara la sesión nocturna.
“Trataba de dar lo mejor que tengo”, añadió.