La caída de Will Levis en el tablero sorprendió a los aficionados durante la primera ronda del Draft de la NFL. El mariscal de campo de Kentucky estaba proyectado para estar en el top 10, pero no fue hasta la segunda selección de la segunda ronda que escuchó a Roger Goodell decir su nombre.
El cuarto quarterback seleccionado esperó pacientemente en el green room todo el jueves. No fue elegido, pero los Titans acordaron un cambio con los Cardinals para tomar con el pick 33 global al jugador que se hiciera viral por comer plátanos sin quitarle la cáscara y porque le pone mayonesa al café.
El jugador comenzó su carrera en el fútbol americano colegial con Penn State, pero tras no poder superar a Sean Clifford, llegó a Kentucky en 2021 donde se asentó como titular. En 24 juegos en la complicada SEC, ganó 17 con los Wildcats.
Con 23 años destacó a nivel por sus atributos físicos. Es fuerte, ágil, rápido, y tiene uno de los brazos más poderosos de los últimos años. De acuerdo a su reporte de reclutamiento, tiene los rasgos necesarios de inteligencia y liderazgo que requiere la posición.
Aunque cuenta con la materia prima, es un talento crudo y aunque tenga el potencial para triunfar, todavía necesita desarrollarse más. Durante su última temporada colegial se mostró inconsistente, poco preciso, e incapaz de tomar decisiones rápidas.
Es un jugador fiel al diseño de jugadas, lo que evita que pueda improvisar cuando sea necesario, y lo hace decidir sus pases antes de leer a la defensiva.
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