La UEFA anunció el miércoles la sanción a José Mourinho por los actos tras la final de la Europa League ante el Sevilla.
‘The Special One’ se perderá los siguientes cuatro partidos continentales que dirija, a consecuencia de la investigación sobre su berrinche tras perder la final en Budapest.
El técnico de la Roma, molesto por un penalti no señalado y las más de 10 tarjetas que se vieron en el partido, que el Sevilla remontó y se llevó en penaltis.
Al finalizar el encuentro, Mourinho fue a los túneles del estadio a increpar al colegiado Anthony Taylor, insultándole y diciéndole que era una desgracia.
“El árbitro parecía español”, aseguró Mourinho tras el encuentro. “El resultado no fue justo y hay muchas instancias que habrá que re-examinar”.
Se esperaba una sanción de por lo menos dos encuentros y se resolvió en el doble, cuatro, por lo que la Roma no tendría a su entrenador en más de la mitad de los partidos de la siguiente fase de grupos de la Europa League, a la que calificaron al ser sextos del calcio de la Serie A.
La Roma también fue sancionada 50,000 euros y no podrá llevar aficionados a su primer partido de visita la próxima temporada por tener bengalas y disturbios en la final en Budapest, además de 5,000 euros adicionales por conducta impropia del club y dar un plazo de 30 días para contactar a la Federación de Hungría para resarcir los daños ocasionados por sus aficionados en el estadio.