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El Real Madrid está a la espera de volver a tener competencia dentro de la Champions League, torneo que ya hizo suyo en 14 ocasiones si juntamos los trofeos alcanzados en la antigua Copa de Europa, sin embargo este año llegan con varias dudas por la plantilla limitada que tendría Carlo Ancelotti.
La institución merengue comienza su aventura en la UCL esta semana ante el FC Union Berlín en el Santiago Bernabéu, un partido que pondrá los primeros compases de lo que podríamos ver el resto de la campaña por parte de uno de los eternos favoritos en esta competición.
El conjunto blanco vivió una nueva novela con el supuesto amague de ir por Kylian Mbappé, el delantero que volvió a las filas del PSG a la espera de qué sucederá con su renovación o posible abandono del club parisino, razón por la cual el conjunto blanco se quedó sin sumar a nadie en el frente más que un Joselu con pocos reflectores, quien a pesar de las dudas, parece ilusionar con alguna que otra anotación.
Queda claro que Carlo Ancelotti tendrá que gestionar una plantilla reducida al conservar a un Luka Modric y un Toni Kross, a quienes cada vez se les nota más el pasar de los años. Si bien mantienen la habilidad, la realidad es que su físico deja cuestionamientos de lo que podría pasar en el resto de la temporada.
Cabe recordar que durante el verano, el Real Madrid perdió a Karim Benzema, su máxima figura al ataque y con dicha baja, la afición blanca esperaba que llegara un centrodelantero al equipo. A lo mucho acabó por fichar a Jude Bellingham, el mediocampista británico que consiguió convertirse en el goleador pese a que no es su rol nato.
Tampoco podemos dejar de lado que perdió al héroe en el fondo que le dio la última Champions League: Thibaut Courtois, el futbolista belga que se perderá el resto de la temporada por una lesión y cuya ausencia será vital en las pretensiones del combinado blanco. De todos modos, no es la primera vez que el Real Madrid luce mermado y tampoco sería la primera ocasión que se repone para ganar una Orejona.