El PSG volvió a sufrir un descalabro en la Champions League. El cuadro parisino se vio superado por el Bayern Munich en los octavos de final, dejando al equipo de Galtier nuevamente en el camino para conquistar Europa.
La derrota no solo es dolorosa, es un fracaso para el Paris Saint-Germain, que en toda su historia no ha podido quedarse con la máxima competencia a nivel de clubes con todo y la inversión millonaria que han tenido en los últimos años.
Desde crear un proyecto alrededor de Kylian Mbappé hasta arroparlo con Messi y Neymar, el PSG ha hecho hasta lo imposible para poder demostrar que están entre los gigantes europeos, pero la vez que más cerca estuvieron fue en el 2020 cuando perdieron la final, justamente ante el Bayern.
Y no es cuestión de una falta de proyecto o de un entrenador capaz, pues en ese banquillo han desfilado Tuchel y Mauricio Pochettino, quienes también se quedaron a un paso de la gloria.
Esta temporada parecía la adecuada para que el PSG reinara, pero el primer obstáculo fue la lesión del brasileño, quien se lastimó el tobillo quedando fuera por lo que resta de esta campaña.
Messi había respondido con cuatro goles y cuatro asistencias durante la fase de grupos, pero volvió a quedar a deber en el duelo de eliminación directa, donde poco pudo hacer por su equipo.
Mbappé, quien se quedó en el PSG en vez de ir al Real Madrid para poder ganar la Champions, volvió a quedarse sin goles y su ofensiva no fue efectiva ante un muro del Bayern que lo ha frenado en incontables ocasiones.
La efectividad en la delantera no solo fue el problema, pues la defensa fue la responsable del primer gol del cuadro bávaro, pero con un tridente como el que presume el PSG, la derrota ha cimbrado al cuadro parisino que podría tener modificaciones para la siguiente temporada.
Esta, tal vez fue la última oportunidad de ver al tridente junto en la Champions League, ya que el camino de Messi, Mbappé y Neymar podría apuntar para un destino diferente. Por ahora, se han quedado sin su corona.