Los Lakers de Los Angeles están en los Playoffs de la NBA. Sufrieron más de lo que se esperaba, en un partido que terminó con un concierto de errores que parecía que nadie quería ganar. Necesitaron de tiempo extra ante lo que quedaba de los Timberwolves, pero al final del día los oro y púrpura lograron el objetivo de calificar como séptimos en el Oeste tras vencer 108-102 a Minnesota.
Los Timberwolves no tenían a los lesionados Jaden McDaniels y Naz Reed, que en el papel serían los dos encargados de marcar a LeBron. Rudy Gobert, quien defendería a Anthony Davis, fue suspendido por dar un puñetazo a Kyle Anderson el domingo. Pero las bajas no quedaron ahí, porque Anthony Edwards sufrió una torcedura de cuello al caer mal en el tercer periodo y Karl-Anthony Towns se la vivió con problemas de faltas en la segunda mitad. Y ni así los Lakers pudieron acabar esto en 48 minutos.
Minnesota comenzó al rojo vivo el partido y llegaron a irse arriba por 10 puntos iniciando el segundo periodo. Lakers logró darle la vuelta, pero la visita cerró la mitad con un parcial de 14-2, con par de triples de Mike Conley, para irse arriba 60-49. El base ni el dominicano Towns habían fallado de campo hasta entonces porque Los Angeles se olvidó de jugar defensa hasta el final.
El margen llegó a ser hasta de 15 puntos en el tercer periodo, cuando llegó la tormenta de calamidades para los TWolves. LeBron (30 puntos, 10 rebotes, 6 asistencias) le sacó una ofensiva y una defensiva a Towns. Instantes antes de la cuarta, Edwards cayó mal y, si de por sí tenía un partidido infame (terminó 3 de 16 de campo, 0 de 8 de triple para apenas 9 puntos), fue un cero a la izquierda cuando volvió con kine-tape en el último cuarto.
Las ofensivas desaparecieron en el cierre. Minnesota estaba tirando más de 50% tanto de triple como de campo a falta de 14 minutos, pero tras el 84-73, anotaron menos de un punto por minuto hasta el final del tiempo extra.
Cuando Towns (24 puntos, 11 rebotes, 5 asistencias) cometió su quinta personal en el arranque del periodo, llegó una racha de Lakers para recortar a 89-86 con 8 minutos por jugar, pero no pudieron darle la vuelta, ni cuando Minnesota tuvo que improvisar con Kyle Anderson como hombre más grande. Fue hasta que quedaban 1.3 segundos, cuando LeBron encontró a Schroder y el alemán puso el triple de la ventaja.
Uno pensaría que eso iba a ser suficiente, pero Anthony Davis (24 puntos, 15 rebotes) atropelló a Mike Conley en su intento de tres puntos, el base encestó los intentos desde la línea, sudando la gota gorda en el primero, y se requirieron 5 minutos más.
En el suplementario, Rui Hachimura abrió hostilidades con un triple y los Lakers nunca cedieron la ventaja. Parecía todo controlado, pero pasaron aceite porque sacaron mal arriba por tres puntos, pero Taurean Prince falló el triple del empate. Juego de tiros libres y a empacar, porque el fin de semana inician serie en Memphis ante los Grizzlies. Los TWolves se jugarán la vida el viernes en casa ante el ganador del Thunder-Pelicans.