Los Knicks y las semifinales de conferencia se mezclaron como el agua y el aceite por una década. No más.
Nueva York acabó la serie ante los Cavs en cinco partidos, ganando el quinto 106-95 en Cleveland para volver a la segunda ronda, territorio que no pisaban desde el 2013. No es poca cosa, porque los Knicks son una de las peores franquicias de la NBA este milenio: en los últimos 20 años, solo Charlotte y Sacramento han ganado menos series de Playoffs que los knickerbockers. No por nada la gente festejó cerrando las calles alrededor de Madison Square Garden tras ganar el Juego 4.
Eso sí, no todo fue felicidad porque Julius Randle se volvió a lesionar el tobillo en la primera mitad.
Al final, no importó: se demostró que Cleveland no tiene suficientes municiones para competir en estas instancias.
Salvo el Juego 2, los Knicks han dominado a placer la serie y el quinto partido no fue la excepción. Victoria de inicio a fin. Nunca fueron perdiendo. Solo par de veces se empató tras el saque inicial. 61 puntos en la primera mitad, en 52.3% de campo y 40% de triple. Hicieron lo que quisieron en la casa del equipo que tenía, en el papel, la mejor defensiva de la liga.
Jalen Brunson comandó la ofensiva neoyorkina con 17 de sus 23 puntos en los primeros 20 minutos. En 13 de 23 tiros de campo repartieron asistencias. Caris LeVert (17 puntos) y Donovan Mitchell (28) intentaron mantener el barco a flote, pero los Cavs simplemente no tienen suficientes caballos: de hecho, ellos y Darius Garland (21 puntos) fueron los únicos que siquiera tiraron más de 6 veces.
Cleveland llegó a ir abajo hasta por 18, pero pudo recortar a seis de distancia (90-84) con 9 minutos por jugar, pero R.J. Barrett (21 puntos) y Immanuel Quickley (19 desde la banca) pusieron tierra de por medio desde la línea para regresar el margen a doble dígito. Apagaron el incendio y navegaron aguas calmadas los últimos minutos.
Los Knicks esperan al ganador de la serie entre Miami y Milwaukee.
Así fue la nueva lesión de tobillo de Julius Randle
Randle sufrió un esguince de tobillo que le costó los últimos cinco partidos de la temporada regular. Se recuperó para el Juego 1 ante los Cavs, pero se volvió a torcer al final de la primera mitad y no volvió.
Se desconoce cuánto tiempo estaría de baja Randle, quien no es la única baja, porque Quentin Grimes se perdió el partido por un golpe en el hombro.
Lo que ganan los Knicks al completar la ‘barrida de caballeros’ es tiempo para Randle. Si Milwaukee gana más tarde el miércoles, la semifinal del Este no iniciaría antes del domingo y podría extenderse al siguiente martes si hay un Juego 7.