Udonis Haslem ha enfrentado todo tipo de situaciones durante sus 20 temporadas con el Heat de Miami. Y en esa lista figuran derrotas en el primer partido de las Finales de la NBA.
Ha visto muchas. Seis, para ser precisos, en siete intentos durante su carrera con el Heat.
Estar en desventaja por 1-0 ante los Nuggets de Denver no es lo óptimo, pero Haslem sabe que ello no anula las posibilidades de Miami. Sus tres anillos de campeonato llegaron en series en que el Heat perdió el primer compromiso de las Finales.
Y ése será el mensaje que transmitirá durante los próximos tres días, hasta el domingo por la noche, cuando comience el segundo duelo.
“Puede lograrse”, dijo Haslem.
Tiene razón. Y a estas alturas el Heat sabe ya que nada de lo que desee le llegará fácilmente.
Prácticamente toda la temporada ha sido un camino tortuoso para Miami. Y así seguirá hasta el final.
La derrota del jueves, por 104-93 en el primer partido, llegó en una noche en que Miami no pudo atinar sus disparos, tuvo problemas graves con los triples antes de una buena racha al final e intentó apenas dos tiros libres —la menor cantidad de cualquier equipo en 4.359 duelos de postemporada en la historia, según la NBA.
“Así hemos estado todo el año”, dijo Max Strus, base del Heat, quien falló sus 10 tiros de campo —de 9-0 en triples— durante el primer partido. “Estamos probados en las batallas. Hemos pasado por muchos momentos adversos este año, así que sabemos cómo lidiar con ello y estar listos”.
La lista de momentos complicados del Heat es larga, por decir lo menos.
No superaron la marca de .500 sino hasta una semana antes de la Navidad. Dieron tumbos durante buena parte del año, sin una racha larga de triunfos.
Ha habido 45 seguidillas distintas de al menos cinco victorias en esta campaña de la NBA, conseguidas por 21 equipos diferentes. Ninguna fue del Heat.
Miami perdió un partido del minitorneo de repesca ante Atlanta, estuvo abajo en el duelo posterior frente a Chicago, casi dilapidó una ventaja de 3-0 contra Boston en la final de la Conferencia Este… y siempre pudo enderezar la nave.
“Así ha sido nuestra trayectoria”, dijo Caleb Martin, quien atinó de 7-1 en el el primer encuentro. “Ésta es la zona de confort de todos. Nunca nos preocupamos en situaciones así. La gente sigue diciendo que algo será difícil sin importar lo que pase, pero nosotros no pensamos así. Vamos a estar listos”.