Daniil Medvedev salió airoso del duelo de rusos en el Abierto de Estados Unidos, imponiéndose el miércoles 6-4, 6-3, 6-4 sobre Andrey Rublev para avanzar a las semifinales del torneo por cuarta vez en cinco años.
Medvedev cedió los primeros juegos del partido ante un Rublev que arrancó como tromba, llevándose 14 de los primeros 15 puntos.
Tercer cabeza de serie y campeón de la edición de 2021 en Flushing Meadows, Medvedev también acusó problemas para respirar en una tarde de calor infernal. La temperatura alcanzó los 35 grados Celsius (95 F) en el estadio Arthur Ashe, cuyo techo fue cerrado parcialmente para generar más sombra. Medveved recibió tratamiento dos veces durante los cambios de lado.
Pero las condiciones no parecieron causar mella en su juego.
Paulatinamente se fue enchufando en el partido contra el octavo del ranking y padrino de su hija. Firmó una victoria en sets corridos en la que fue superior en largos peloteos, incluyendo uno de 34 que fue el más largo del encuentro.
“Fue brutal”, resumió Medvedev sobre el calor. “Lo único bueno en estas condiciones en que ambos sufrimos”.
“Yo lo conozco bien y él nunca se rinde. Él me conoce y sabe que yo soy igual”.
Rublev sigue sin poder superar la barrera de cuartos de final en citas de Grand Slam: ha perdido en las nueve ocasiones que ha accedido a la instancia.
Medvedev, subcampeón en Flushing Meadows en 2019 y semifinalista en 2020, quedó a la espera del ganador del partido entre el campeón defensor y máximo preclasificado Carlos Alcaraz y Alexander Zverev (12do cabeza de serie). El español y el alemán jugaban en la sesión nocturna.