Novak Djokovic recibió una multa por perder el control en la derrota de Wimbledon a manos de Carlos Alcarez, un partido en el que el español comenzó a dar cátedra a partir de un punto que le robó al serbio y que provocó la furia de uno de los mejores jugadores de todos los tiempos.
El jugador serbio tomó su raqueta y la rompió, un momento de furia que no pasó desapercibido por parte de las autoridades de Wimbledon que decidieron cobrarle al tenista unos 8 mil dólares.
La postura del rival de Carlos Alcaraz no cayó bien dentro del entorno al campo de pasto, así que los mismos aficionados olvidaron el silencio que caracteriza este deporte para comenzar una rechifla en contra del favorito a llevarse la corona a casa.
Novak Djokovic tendrá que esperar al próximo Grand Slam para tratar de sumar una corona más a su carrera. El serbio lleva hasta el momento 23 trofeos de este tipo, sin embargo esto no evita que siga con ese sentimiento de frustración cada vez que pierde en el terreno de juego, una situación que ya le provocó algunas críticas por su falta de manejo de las emociones.
A raíz del punto que le quitó a Carlos Alcaraz, el serbio inició su debacle para un partido en el que acabó con un 6-4 en favor del español y así sellar su primer trofeo de Wimbledon en un crecimiento a pasos agigantados de la carrera del tenista ibérico.