Novak Djokovic simplemente no pierde en Wimbledon. Ya son 34 victorias al hilo y está a la puerta del octavo título, al barrer al italiano Jannik Sinner en tres sets, 6-3, 6-4, 7-6 (4).
Trabajo rápido para el serbio, en apenas 2 horas y 46 minutos en la cancha central, donde prácticamente nunca pierde y, por tercera ocasión en su carrera, llega a la final de los primeros tres Grand Slams del año (2015 y 2021), llevándoselos todos en la última ocasión. En 2023 ya tiene el Australian Open y Roland Garros, en busca de barrer todos, algo nunca visto en el tenis.
Si bien se llevó el juego en tres sets, no fue la mejor versión de Nole, con algunas malas decisiones que le complicaron la vida para sostener su servicio, pero la diferencia fue que Djokovic aprovechó las pocas oportunidades de quiebre que tuvo y Sinner no lo hizo.
El italiano tuvo dos pelotas para quebrar en el primer juego de servicio del partido, pero Djokovic lo arregló tras el tercer deuce. El serbio no desaprovechó la primera y única oportunidad que break que tuvo en el primer set para ponerse 2-0, levantó un 30-40 para ponerse 4-1 y se llevó el primer set 6-3.
En el segundo, Nole quebró para el 2-1 y luego llegaron par de polémicas con los jueces, ya que le dieron un punto a Sinner por haber gritado y le asignaron una advertencia por el tiempo de saque, pero aún así logró solventar el problema. Pudo terminarlo antes, pero dejó ir dos bolas de break en el séptimo juego, pero sostuvo su servicio toda la tarde.
Sinner evitó la catástrofe al sostener su primer juego de servicio pese a ir abajo 0-40 y tuvo dos pelotas de set arriba 4-5, pero Djokovic resolvió con el servicio para ir al tie break. El italiano logró el primer mini quiebre, pero lo devolvió con una doble falta y cometió tres errores no forzados para entregar el juego.
Nole espera al ganador de la segunda semifinal entre Carlos Alcaraz y Daniil Medvedev en busca de su octavo título en el All England Club y 24 ‘grande’.