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Myles Jack decidió poner punto final a su carrera en la NFL. El linebacker, que a inicio de agosto firmó con los Philadelphia Eagles, optó por el retiro en lugar de disputar su octava temporada como profesional y ya tiene listo su siguiente e inusual carrera: ser plomero por si hay que reconstruir el mundo.
Jack fue cortado en 2022 por los Jaguars y en 2023 por los Steelers, por lo que comenzó a pensar en la vida lejos del emparrillado. En lugar de seguir el camino de muchos ex jugadores, que piensan en los medios, ser entrenador o pasar a la directiva, el linebacker quiso aprender un oficio que pudiera ser útil para construir algo en caso de un apocalipsis zombie. Plomero y electricista eran sus opciones y se decantó por la primera.
“Me gusta trabajar. No podría no hacer nada en casa. He sido bendecido con ganar mucho dinero. Podría retirarme y estar sin hacer nada en casa, pero quiero ser innovador. No sé, si un apocalipsis zombie sucede, quiero poder construir o arreglar cosas”, dijo en tono sarcástico hace par de semanas tras firmar con los Eagles.
Jack fue elegido en la segunda ronda del Draft de la NFL en 2016, proveniente de UCLA, donde era uno de los mejores atletas de la NCAA. Su tercer año fue cortado por lesión tras apenas tres juegos, pero en 2013 y 2014 jugó tanto de linebacker como corredor, acumulando 117 tackleadas, 4 intercepciones, 1.0 sacks, 387 yardas por tierra y 11 anotaciones terrestres.
Jacksonville le tomó en el Draft y formó parte de la defensiva que llevó a los Jaguars a la final de la Conferencia Americana en la temporada 2017, en la que perdieron una ventaja de 10 puntos ante los Patriots, con la jugada clave siendo un fumble que Jack recuperó e iba a devolver para anotación, pero los árbitros pitaron como jugada muerta y el balón lo tomaron en su campo. La ofensiva comandada por Blake Bortles solo consiguió mover las cadenas dos veces en todo el último periodo, Tom Brady hizo cosas de Tom Brady y los Patriots avanzaron al Super Bowl LII.
Tras terminar su contrato de novato en 2019, renovó por 4 años y 57 millones con los Jaguars, que en plena reconstrucción le cortaron en 2022. Firmó con los Steelers por 2 años y 16 millones, y tuvo 104 tackleadas en 15 partidos, pero de nuevo le cortaron. En total en su carrera, habría ganado poco más de 50 millones de dólares, según datos de Sportskeeda.
El safety de los Cardinals y su ex compañero en la preparatoria, Budda Baker, le convenció de no decir adiós y seguir entrenando, tras lo cual llegó la oferta de los Eagles, que necesitaban apoyo en la posición de linebacker medio al perder a Kazyr White y T.J. Edwards. Le firmaron junto a Zach Cunningham y los primeros dos partidos de pretemporada.