El mariscal de campo de los Philadelphia Eagles, Jalen Hurts, y el mariscal de campo de los Cleveland Browns, Deshaun Watson, vieron vestidos de calle al margen mientras sus posibles suplentes luchaban en un juego de pretemporada empañado por lesiones.
Marcus Mariota de Philadelphia lanzó para 85 yardas y Dorian Thompson-Robinson de Cleveland lanzó para 164 cuando los Eagles y Browns empataron 18-18 el jueves por la noche.
Mariota completó 9 de 17 pases con una intercepción y fue capturado tres veces en la primera mitad por los Eagles, campeones defensores de la NFC. Firmado con un contrato de un año en la temporada baja para respaldar a Hurts, Mariota estuvo alto y desviado en varios tiros mientras jugaba detrás de los linieros ofensivos de reserva y los receptores de reserva de Filadelfia. La mayoría de sus pases completos fueron pases cortos que recorrieron yardas más largas en carreras posteriores a la recepción.
“Sé que no jugó de la manera que quería jugar esta noche, no a la altura de su nivel”, dijo el entrenador de los Eagles, Nick Sirianni. “Sobre que encontremos lo que funciona para él”.
Filadelfia firmó al ex ganador del Heisman y selección general número 2 de 2015 esta temporada baja porque, al igual que Hurts, puede ser una amenaza de carrera y pase. El veterano de 29 años ha corrido para 2,012 yardas y 17 touchdowns en su carrera, pero también tiene 54 intercepciones en 87 juegos de carrera.
Los fanáticos de los Eagles abuchearon a Mariota cuando su pase al final del primer cuarto destinado al ala cerrada Grant Calcaterra salió alto y fue interceptado por el profundo de los Browns, Ronnie Hickman. La media de Mariota remató, como corresponde, con saco.
“Estoy aprendiendo sobre la marcha, bueno, malo o indiferente”, dijo Mariota. “Lo tomaré en la barbilla y simplemente aprenderé”.
Hurts era solo un espectador. Los Eagles no se arriesgan esta pretemporada con el subcampeón del MVP de 2022 que firmó un contrato de cinco años con $179.3 millones garantizados en la temporada baja.