Jonas Vingegaard dio un golpe de autoridad en la contrarreloj individual del martes en el Tour de France. Una etapa para la historia, que desafía toda lógica, porque le sacó 1:38 a Tadej Pogacar, que no es que haya tenido un mal día: el esloveno fue segundo, con 1:13 de ventaja sobre Van Aert.
De no creerse: Pogacar casi alcanzó a Carlos Rodríguez, quien perdió el tercer lugar por cosa de cinco minutos, pero Vingegaard casi pesca a ambos.
El Tour pudo quedar sentenciado el martes ante la histórica exhibición del danés, que tiene en la mano el bicampeonato. Ya no hay finales en alto, aunque el miércoles y el sábado son etapas de montaña, donde Pogacar recortó distancias, pero realmente nunca pudo dejar en el camino a Vingegaard. Seguro que el esloveno lo intentará, como hizo cada que pudo el año pasado y lo ha intentado cada etapa de montaña en 2023, pero no logra dar un golpe contundente y la ventaja del martes puede ser definitiva.
Desde que el líder de la carrera pasó el primer punto de referencia, se veía que Vingegaard estaba en otra dimensión. 16 segundos sacó en el primer paso, ya era medio minuto a 10 km. a meta y solo aumentó. Al final, la diferencia en la general es de 1 minuto y 48 segundos.