El argentino Emiliano Grillo embocó un putt desde larga distancia en el 18vo hoyo para quedar el jueves como uno de los líderes del Abierto Británico de golf.
Grillo firmó una tarjeta de 66 golpes, cinco bajo el par de campo, tras el disparo desde 51 pies con el que completó la primera ronda.
Comparte el liderato con el amateur sudafricano Christo Lamprecht y el inglés Tommy Fleetwood.
La presencia de estos tres golfistas en la cima de la tabla de los marcadores dejó claro que, incluso después de 163 años, el campeonato más viejo de golf en el mundo puede deparar sorpresas.}
Rory McIlroy cerró seis golpes detrás de los líderes tras un flojo comienzo en su intento por poner fin a una sequía de nueve años sin ganar uno de los cuatro grandes torneos del golf. Salvó su ronda con un par de birdies consecutivos en la segunda parte del recorrido.
Por si faltaba algo, Jordan Spieth incurrió en un cañazo, McIlroy falló un putt de tres pies, Justin Thomas fue de una trampa a otra y al pasto crecido, alejándose cada vez más el hoyo 18, en el que requirió de nueve golpes.
Así, Thomas firmó su peor ronda en un major, con 82.
McIlroy se conformó con una tarjeta de 71. Corrió el riesgo de que la ronda lo hundiera en definitiva, pero compensó sus errores con un birdie de 40 pies en el 14.
Scottie Scheffler, número uno del mundo, se ubicó en 70 por la mañana, antes de que la brisa se convirtiera en un viento más intenso.
El español Jon Rahm, monarca del Masters, llegó a un punto en que sintió que nada le saldría. Hizo lo que parecía un buen tiro hacia el 18, sólo para caer en la trampa de arena. Debió retroceder al fairway y resignarse a que una oportunidad de birdie se convirtiera en bogey.
Rahm abrió con un 74.
“Este campo te plantea muchos enigmas”, dijo Shane Lowry, exasperado tras una ronda de 72.
Y a cambio de todas esas preguntas, las 15 horas de golf aportaron pocas respuestas.
Fleetwood abriga esperanzas de ser el primer inglés en ganar un Abierto Británico en Inglaterra desde que Tony Jacklin lo logró en 1969. Trató de moderar el optimismo, pese a que está al tanto del apoyo del público.
“El primer día ha sido bastante bueno”, dijo Fleetwood. “Todo lo que quiero es seguir trabajando duro y jugando. Quiero ponerme en una buena situación. Y evidentemente, pronto llegará mi turno”.