El Napoli finalmente puede festejar el título de la Serie A. La tercera fue la vencida. La Salernitana de Memo Ochoa se los impidió el fin de semana, la Lazio lo postergó al ganar el miércoles, pero el jueves, finalmente, el equipo de Spalletti sumó el punto que les hacía falta al empatar 1-1 ante el Udinese. Acabó la espera eterna, en que media semana parecía 33 años. Por primera vez desde 1990, el Scudetto es del Napoli.
Un golazo de Lovric al minuto 12, amenazaba con postergar esto hasta el fin de semana, cuando menos. Un gol casi de vestidor, en una larga jugada en que los locales pasearon el esférico de lado a lado de la cancha, terminó con un derechazo a segundo palo que entró por la escuadra, imposible para Meret.
El Napoli, con Chucky Lozano en la banca, se mostró ansioso e impreciso. No tuvo claridad para generar ocasiones de peligro en la primera mitad y fue hasta el segundo tiempo que lo lograron igualar, cortesía del capocannoniere.
Victor Osimhen firmó su gol 22 de la temporada en una triple jugada tras un córner. El Udinese no pudo despejar, el balón fue de un lado a otro y un rechace de Silvestri al tiro de Kvaratskhelia dejó el arco abierto para el tanto del nigeriano.
La locura de vuelta en Nápoles y en la Dacia Arena, que se volvió una sucursal del Estadio Maradona por la gran cantidad de aficionados del Napoli que hicieron el viaje para ver la coronación. Nadie se lo quería perder.
Los últimos minutos, el Napoli estuvo más cerca al gol. Un poco de sufrimiento más y el festejo de tres décadas finalmente se dio.