No fue un torneo nada sencillo para Santiago Giménez, quien tuvo que aguardar en el banquillo de suplentes para buscar una oportunidad y este domingo, entrando en los últimos minutos, anotó el solitario gol que le da a la Selección Mexicana su novena campeonato de la Copa Oro.
Tras ser clave en la obtención de la corona, Santi habló con TUDN sobre sus sentimientos y declaró: “No con palabras, con el título y esta Final, el grupo se unió… Es indescriptible, lo único que siento es amor y pasión por los que siempre están, primero es Dios, mi familia y la gente que hoy vino, 75 mil personas y había que darles esta copa”.
“Estoy emocionado, los tiempos de Dios son perfectos, y dónde vino a caer el gol. Cuando la tuvo Orbe vi que salió un defensor y sabía que estaba mano a mano, cuando me di vuelta vi que el defensa estaba cansado, le tenía que ganar por velocidad, le pegué un poco machucado, pero entró, es lo bueno”, sentenció el canterano de Cruz Azul al relatar el gol.