Lo único que le salió bien a Estados Unidos la madrugada del martes fue que avanzaron a octavos de final del Mundial femenino. El empate ante Portugal, sumado a que Países Bajos sí logró una goleada de escándalo ante Vietnam, les dejó en el segundo lugar, a milímetros de quedar, fuera, pero el primero objetivo se logró.
El problema es que el camino a la final se ha complicado a sobremanera. De tener cruces probables ante Italia, casi seguro se medirán a Suecia, con España en cuartos y no hasta semifinales, y tendrán que hacerlo sin la Balón de Bronce del último Mundial, Rose Lavelle.
La mediocampista, titular por primera vez en el Mundial, fue amonestada en la primera parte, en una barrida en la que parecía que no hacía contacto en un principio, pero al final tocó el pie de Dolores Silva para ver la cartulina.
Lavelle llegaba apercibida, tras ver la amarilla casi en su primera jugada ante Países Bajos, cuando entró al descanso y a los minutos fue amonestada.
Vlatko Andonovski tendrá que mover a su alineación de nueva cuenta. En los primeros dos partidos, Savannah DeMelo fue titular, aunque no vio acción en el último partido de la fase de grupos,