El Mundial Femenino 2023 dio una de las sorpresas más grandes de los últimos años. Estados Unidos quedó eliminada en los octavos de final a manos de Suecia en una polémica tanda de penaltis. Un resultado que no solo pone fin a una de las eras más dominantes del fútbol femenino, además podría ser el último partido de las leyendas de la selección.
Antes de que iniciara el Mundial, el bombazo cayó en USWNT, cuando Megan Rapinoe anunció que esta justa sería la última de su carrera y que se retiraría del fútbol profesional al terminar la campaña de la NWSL. Un adiós que ya se tenía contemplado, pero que con este duro golpe termina siendo más doloroso.
Megan poco pudo hacer en la Copa del Mundo, entrando de cambio en dos partidos y sin lograr anotar. Su último penalti que cobró con la selección fue fallado y a la postre colaboró con la eliminación del equipo.
A ella se une Julie Ertz, quien dijo al final de partido que sería su último juego con USWNT, teniendo un doloroso regreso tras ser mamá y que la mantuvo fuera de las canchas por varios meses.
El caso de Alex Morgan es diferente, pues la histórica delantera dijo que no tiene planes de retirarse en el momento, pero a su 34 años estaría viviendo sus últimos partidos con la selección a la espera de ir a unos últimos Juegos Olímpicos.
La arquera, Alyssa Naeher y la jugadora, Kelley O’Hara, con 35 años de edad, estarían viviendo sus últimos partidos con las barras y las estrellas. Así como algunos nombres que se quedaron fuera del Mundial por lesión con Becky Sauerbrunn, Abby Dahlkemper, Tobin Heath y Christen Press.
El fin de una era con las jugadoras más dominantes llegó, pero el USWNT tiene un futuro prometedor.