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El Arsenal de Mikel Arteta le plantó cara al Manchester City de Josep Guardiola y un gol de Gabriel Martinelli fue suficiente para sentenciar al último campeón de la Premier League. Los Gunners sacaron una victoria importante porque con este resultado ya amenazan con quedarse en la cima del fútbol británico, una posición que tuvieron en su momento durante la temporada pasada y que dejaron ir ante los Citizens.
El Emirates Stadium estuvo repleto para ver a su equipo sacar un resultado importante contra sus rivales directos en lo que resta de la campaña, tal como pasó hace un año. Mike Arteta aprendió de las lecciones pasadas y colocó un verdadero muro para detener a Erling Haaland y compañía, algo que funcionó porque le propinaron la primera derrota al City en 15 partidos en enfrentamientos directos con 13 victorias y dos empates, de acuerdo con estadísticas de Transfermarkt.
Uno de los primeros avisos sucedieron en los primeros cuatro minutos cuando Nathan Aké se quedó solo con el portero tras recibir un pase de Kovacic, pero tuvo que mandar la bola por encima del travesaño al acomodarse de mala forma. Gvardiol más tarde tendría la misma chance de marcar, sin embargo Declan Rice salvó a los suyos con su propia testa.
Bernardo Silva quiso acomodar algunos compases en el medio campo y la posición del jugador era vital para tener el control del partido, sólo que el trámite no le ayudaría en nada al Manchester City. Una acción de Kovacic sobre Odegaard quedó en el VAR, pero no hubo más allá de una revisión para determinar la gravedad de la falta.
Julián Álvarez tomaba más protagonismo que Haaland y un tiro a portería acabó por ser un gol de campo debido a que la mandó por encima de la portería contraria. En la segunda parte, el Arsenal acomodó fichas porque parecía que la noche se les iría encima. El Manchester City mantenía su hegemonía en el campo, aunque ya avisaba Arteta que tenía las acciones controladas.
Cuando no pasaba nada, Gabriel Martinelli sacó las papas del fuego con un gol que dejó rendido al Manchester City. El Arsenal se llevó los tres puntos y sólo por la diferencia de goles con el Tottenham, todavía no son líderes absolutos de la Premier League.