A la MLS le salió un nuevo competidor y es que Arabia Saudita ingresó a la pelea con una impresionante cantidad de millones para tratar de convencer a jugadores del concierto europeo de fichar en el fútbol exótico de medio oriente, sólo que a diferencia de los Estados Unidos, la Liga Saudí va por jugadores en su plenitud.
Europa parece tener los días contados porque desde Estados Unidos como en Arabia Saudita comenzaron a cambiar el mapa futbolístico en una revolución que de continuar así, podrían darle un traspie al panorama futbolístico que conocemos desde la profesionalización de este deporte.
Leo Messi y Cristiano Ronaldo, los dos mejores futbolistas de su generación y dos de los mejores de todos los tiempos, son la muestra clara de las intenciones de parte de la MLS y de la Liga Saudí de dar un golpe sobre la mesa, puesto que los millones que le ofrecierona los dos jugadores fueron lo suficientemente superiores a lo ofrecido por otros equipos.
Arabia Saudita entra a la contienda
Durante las últimas semanas, Arabia Saudita presumió el ingresó de Karim Benzema, N’Golo Kante, Ruben Neves, Edouard Mendy, Marcelo Brozovic, Kalidou Koulibaly y Hakim Ziyech, a la espera de sumar más nombres para la próxima temporada. Todas las estrellas mencionadas siguieron los pasos de Cristiano Ronaldo, aunque la tarea no es tan complicada cuando la Liga Saudí les ofreció contratos de otro planeta, pues para muestra los 400 millones de euros que va a cobrar Benzema en las próximas dos temporadas o los 75 millones de euros para Cristiano Ronaldo por año.
Jugadores como Alexis Sánchez, Romelu Lukaku, Edinson Cavani, Bernardo Silva, Álvaro Morata y Roberto Firmino, por mencionar algunos serían parte de los objetivos para que el fútbol de Arabia Saudita dé un salto cuántico en esta industria.
La MLS sigue con un crecimiento sostenido
A raíz de la Copa del Mundo de 1994, los Estados Unidos prometieron que iban a tener un fútbol profesional de élite. Pelé ya había sentado las primeras bases con el Cosmos de Nueva York unos años antes, pero no fue hasta el ingreso de David Beckham que el fútbol norteamericano tomó un interés mayor para los jugadores profesionales.
Chiellini, Lorenzo Insigne, Riqui Puig y Héctor Herrera se sumaron durante la última época a una liga que ya presumió en el pasado a elementos como Zlatan Ibrahimovic y que ahora busca un antes y un después con los 50 o 60 millones que habrían ofrecido por Leo Messi, uno de los mejores jugadores de todos los tiempos, a quien le llevaron en el Inter Miami a estrellas como Busquets.
Europa todavía tiene la dicha de tener elementos de élite jóvenes, pero si la tendencia sigue en este sentido, entonces no dudemos de que el mapa futbolístico podría cambiar para siempre, sobre todo si se siguen manejando los montones de billetes que serían incapaces de ser igualados por el mercado europeo de por sí ya inflado.