El Inter Miami volvió a caer dentro de la temporada regular. El nuevo equipo de Leo Messi no levanta y el Philadelphia Union aprovechó el mal momento para clavarle cuatro goles en una goleada que ha de poner a pensar muchas cosas al jugador argentino que en unas cuantas semanas tendría que debutar.
Las complicaciones que se le vienen al ex jugador del Barcelona con su reciente llegada al equipo de la Florida, pues para muestra el 4-1 que sufrió a manos del Philadelphia Union en el Subaru Park, la séptima derrota al hilo para un equipo que busca cambiar la tendencia con la incorporación de uno de los mejores jugadores de toda la historia.
Jakob Glesnes fue el primero en abrir el marcador tras impactar con la testa el balón que venía de un tiro de esquina para arrancar los primeros gritos de gol y desde esos primeros 15 minutos, todo parecía más que cantado. Julian Carranza aprovechó un pase de Mikael Uhre y con un tiro cruzado, el combinado de David Beckham ya ganaba por dos goles antes de finalizar la primera parte.
Leon Flach no quiso irse sin su anotación, así que un balón que le llegó a baja altura fue más que suficiente para vencer al portero rival e irse al descanso con una diferencia de tres goles. Con el comienzo de la segunda parte, Robert Taylor quiso reducir la diferencia del marcador y un impacto de media distancia por poco le da esperanzas al Inter Miami que se encontraba con un 3-1.
David Ochoa Posas dejó caer el gol en propia portería, una imagen que muestra que el Inter Miami de Leo Messi sigue sin despegar. Sus 15 puntos a lo largo del reciente campeonato los pone en la última posición de la Conferencia Este y nada más no está en el sótano de toda la MLS debido a que Colorado y el LA Galaxy tienen un torneo todavía peor.