Leo Messi fue interceptado por los aficionados del Inter Miami y otros tantos que buscaban una fotografía de uno de los mejores jugadores de la historia, así que el astro argentino no dudó en regalar algunos autógrafos y fotografías pese a la personalidad que todos conocen del nuevo jugador del equipo de la Florida.
El argentino ya está en los Estados Unidos a la espera de su presentación oficial con el conjunto de David Beckham este próximo domingo 16 de julio, día en el que portará por primera vez el jersey del combinado rosa.
Sin embargo, a unos días de la llegada de Leo Messi a la MLS, algunos medios de comunicación y aficionados del fútbol vieron cómo el sudamericano estaba en un restaurante con su familia en las inmediaciones de Miami, la nueva ciudad en la que el delantero desplegará sus últimos toques con el balón antes de decirle adiós a los campos de juego.
Messi estaba en el Prima Pasta de Miami Beach, un recinto en el que llegó de incógnito para cenar con su esposa e hijos, pero al aparecer los aficionados, el jugador decidió firmar algunas camisetas para comenzar con su relación con la afición que verá por los próximos dos años y medio por un contrato que llegaría entre los 50 y 60 millones de dólares.
El recién campeón del mundo dijo estar dispuesto a firmar un contrato con el Inter Miami. Laporta, presidente del Barcelona, reveló durante los últimos días que el ex jugador del club catalán ya tenía todo apalabrado con el astro argentino, pero de un momento a otro, el regreso no pudo suceder porque el padre de Messi les llamó para decirles que su hijo quería un ambiente más tranquilo.