El Barcelona sigue sin mostrar su mejor versión. Parece que va a ganar en piloto automático LaLiga, con la gracia del Real Madrid, ya que no pudo resolver el acertijo que propuso el Girona, que salió del Camp Nou con un empate 0-0. Pudo ser más, pudo ser menos para ambos.
Los culés no sucumbieron como el Real Madrid tras las semifinales de la Copa del Rey, pero sumó su segundo partido sin ganar en casa en todas las competiciones. Estuvieron más cerca del arco rival, tuvieron par de ocasiones sui generis en las que casi marcan, pero les está costando mucho ver portería. Siguen extrañando a Dembélé y Pedri. Los de Xavi no han sido los mismos sin ellos.
Ansu Fati y Eric García fueron las novedades de Xavi para el partido, en lugar de Marcos Alonso, Sergi Roberto (Gavi jugó más atrás que ante el Madrid). Dos mundialistas en Qatar, pero que han caído a tal grado que no fueron a la primera convocatoria de Luis de la Fuente tras la salida de Luis Enrique. Ninguno fue particularmente destacado.
El Girona metió miedo temprano. En la primera jugada del partido, Taty Castellanos estuvo a punto de jugarse un mano a mano con Ter Stegen, pero Koundé recompuso de último segundo. En la siguiente acción, Tsygankov prendió una volea que sacó un susto a más de uno en el Camp.
De ahí, comenzó a dominar el Barça y casi llega un gol de blooper del año, porque Santi Bueno tocó hacia atrás, pero Gazzaniga no estaba ahí y el portero tuvo que barrer para salvar en la línea justo antes de que se oyeran los ya habituales gritos de ‘¡Messi! !Messi!’ en el Camp al 10′.
El Barça tuvo múltiples ocasiones en las que llegaron a línea de fondo, pero el pase de la muerte o el disparo fallaron. A balón parado casi llega el tanto, en un córner de Araujo que Gazzaniga salvó en la línea.
También a balón parado tuvo una Eric García. Koundé tuvo otra en un centro mal despejado. Taty Castellanos tuvo la más clara para el visitante en una contra en la que resolvió muy precipitado antes de enfrentar a Ter Stegen y teniendo solo a Iván Martín para que entrara caminando al arco. Y después de eso, se fue apagando el partido. Lewandowski casi soluciona todo con un taco en el agregado.
Empate, quizá un resultado justo, para un encuentro que no pasará a la historia. Lo que sí, el Barcelona está con 13 de ventaja a falta de 10 jornadas.
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