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El Barcelona puso en juego el Joan Gamper con el Tottenham Hotspur en un partido en el que se fueron arriba del marcado de manera temprana, en un resultado tramposo debido a que el conjunto de la Premier League comenzó a poner condiciones conforme pasaban los minutos. Sin embargo, el ADN catalán resurgió para darle la vuelta a la pizarra en los últimos minutos y terminar con un 4-2 a favor.
El torneo que sólo tiene a dos participantes tenía a un conjunto blaugrana invicto durante la última década tras la derrota que sufrió en 2012 a manos de la Sampdoria de la Serie A. Es más, en todos los partidos de este campeonato desde entonces, los catalanes ganaron casi en su mayoría con marcadores abultados. Y la noche de este miércoles en España no sería la excepción, pese a tener un marcador en contra en gran parte del partido en el Estadio Olímpico de Montjuic.
Los catalanes arrancaron con un gol tempranero de parte de Lewandowski, el delantero que remató un pase casi cerca del área chica con un zurdazo que se coló en la portería de Vicario, pero el gustó duró poco debido a un doblete de Oliver Skipp que en dos ocasiones vacunó al conjunto local.
Oliver Skipp contrarremató un balón que había quedado muerto tras impactar el poste izquierdo de ter Stegen y así ponía el empate en el minuto 24’. Un toque continúo de pases de los británicos comenzó a darles el protagonismo de las acciones.
Cabe resaltar que Araujo tuvo oportunidad de tener algunos minutos al entrar de cambio por Sergi Roberto, quien sintió algunas molestias tras el gol del Tottenham Hotspur. Oliver Skippe más tarde remataría de cabeza para colocar el segundo ante una defensa que quedó mal parada en unos minutos posteriores a la media hora.
Casi todo el resto del partido, el equipo que dirige Postecoglou tuvo el balón en su poder a la espera de un Barcelona que se veía que quería jugar a la contra y así cayó el segundo tanto gracias a una jugada de Lamine Yamal, el jugador de 16 años que entró de cambio y quien arrastró el balón por el extremo derecho para dejar un bombón a Ferran Torres para meter el empate en un partido que parecía que se le irían a los españoles.
No fue hasta que el Barcelona recuperó su ADN para darle un pase a Ansu Fati, para que éste se luciera con un gol que le dio la vuelta a un marcador que parecía casi finiquitado. Con la defensa del Tottenham maltrecha, Abde Ezzalzouli aprovechó las facilidades para concretar 4-2, todo gracias a los cambios de parte de Xavi Hernández como el caso de Lamine Yamal.