Noticias positivas para el Barcelona tras pasar un mal fin de semana por culpa de un virus estomacal.
La plantilla tuvo un entrenamiento el lunes en el Memorial Coliseum de Los Angeles y todos los jugadores estuvieron presentes. Solo Iñigo Martínez entrenó por separado, pero no se debe al virus, sino a la lesión del pie de la que se recupera y que aplazaría su debut.
Xavi programó una sesión doble de entrenamientos el lunes, lo que indica que el equipo ha mejorado considerablemente de la infección que obligó a cancelar el partido del sábado en Santa Clara ante la Juventus. Fueron más de una docena de jugadores los que padecieron la gastroenteritis, con Koundé el primero en caer.
“El FC Barcelona tiene muchas ganas de debutar ante sus aficionados americanos en el partido que se jugará en el SoFi Stadium de LA el próximo miércoles 26 de julio”, leía un comunicado del equipo azulgrana del domingo por la noche.
El partido del miércoles ante el Arsenal en el SoFi Stadium no corre peligro, en lo que sería el primero de tres juegos en Estados Unidos. El siguiente sábado jugará ante el Real Madrid en Arlington, y el 1 de agosto en Las Vegas ante el Milan.
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