El viaje de Leo Messi a Arabia Saudita ha ocasionado mucha molestia al interior del PSG.
Según reportó L’Equipe el martes, Leo habría viajado a atender un compromiso comercial a Arabia Saudita, parte de su acuerdo como embajador del país y que hasta en dos ocasiones había pospuesto porque el equipo perdió el partido previo a la fecha del viaje; concretamente, tras quedar fuera de la Champions ante el Bayern y tras una caída en la Liga de Francia, según información del Diario Marca.
El astro argentino viajó el lunes a Medio Oriente, aprovechando que el equipo parisino originalmente no tenía programado entrenamiento el lunes y el martes, un modus operandi habitual cuando vienen de jugar en domingo. Leo ya iba volando cuando Galtier cambió de opinión y agendó una sesión a la que resultó imposible que el argentino asistiera.
La decisión de Leo no cayó nada bien en el PSG. Al-Khelaifi, quien estaba en Estados Unidos, explotó al enterarse del viaje de Leo y decidió tomar cartas en el asunto personalmente y estudia tomar medidas por esta indisciplina de Leo.
Fabrizio Romano dio a conocer el martes por la tarde que Messi será apartado dos semanas del equipo. Eso le costará los encuentros del domingo ante el Troyes y del sábado 13 ante el Ajaccio.
El viaje a Arabia llega en un momento muy tenso entre Messi y el PSG. Leo puede dejar el equipo en el verano. Las negociaciones para renovar se han pausado y toma fuerza el adiós a París. La situación deportiva del equipo no ayuda nada. Siguen líderes en Francia, pero perdieron el domingo en el Parque de los Príncipes ante el Lorient, reduciendo su ventaja en el liderato de la Ligue 1, el único título al que aspiran este año.
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