Lewis Hamilton está a punto de tocar el límite de la frustración después de un fin de semana complicado en el que tuvo problemas con su Mercedes, algo que ya dejó de ser novedad en una temporada que cada vez se ve más complicada ante el dominio de los Red Bull Racing.
El problema es que el enojo del siete veces campeón no fue en privado, sino que sus reclamos comenzaron desde la radio en un intercambio difícil con Toto Wolf que después se trasladó a las cámaras de televisión internacionales.
Lewis Hamilton iba en quinta plaza y al competir por el cuarto puesto con Lando Norris, su compatriota reclamó que el siete veces campeón mundial había rebasado el límite de las curvas, razón por la cual las autoridades presentes decidieron sancionar al piloto de Mercedes con cinco segundos, una penalización que lo mandó al séptimo sitio.
“Lewis, sabemos que el auto ahora es muy malo, pero, por favor, conduce”, le dijo Toto Wolff para evitar cualquier tipo de berrinche de parte del conductor británico,. quien al terminar con el Gran Premio de Austria, tomó los micrófonos de ESPN y lanzó una de las declaraciones de guerra más duras de lo que va en la temporada para su propio equipo.
“Todo el auto es el problema. Estuvimos complicados en todas las curvas. Ese es el mayor problema. No tengo idea dónde vamos a estar el próximo fin de semana. El evento es increíble, espero que de alguna manera seamos competitivos”, remató Lewis Hamilton.
Que Mercedes esté por debajo del nivel de los Red Bull Racing de Max Verstappen y Checo Pérez ya no es una novedad, pero el problema es que la escudería alemana ni siquiera puede mantener el ritmo con los demás competidores en una temporada que luce para el olvido.