Si hay alguien que no la está pasando nada bien en el campeonato mundial de la Fórmula 1 es el siete veces campeón, Lewis Hamilton, quien habló fuerte en contra de su auto este viernes tras el primer día de actividades en el Gran Premio de Miami.
“Es la misma situación cada fin de semana. Estamos a un segundo de los mejores. Todo es genial aquí, el problema es que no somos especialmente rápidos, nos cuesta en la pista. Estamos intentando tantas cosas diferentes…”, puntualizó el piloto británico.
Aunque Lewis no baja las manos y espera que con algunos cambios puedan sacar un buen resultado este fin de semana: “En los libres 1 todo parecía ir bastante bien, pero luego en los libres 2 salió a relucir nuestro verdadero ritmo. Es una patada en el estómago. Es un poco difícil de asimilar, pero no pasa nada, seguiremos trabajando en ello. Esta noche nos reagruparemos e intentaremos hacer cambios de puesta a punto para colocar el coche en mejores posiciones”
“En Melbourne la diferencia fue sustancial. Fue muy agradable conducir allí. Quizá aquí sea cuestión de las temperaturas, del calor, o quizá sólo del equilibrio que tenemos en este momento. Espero que mañana podamos dar un par de pasos adelante. Sin embargo, aparte de las violentas sacudidas que tuvimos en 2022, en general parece que corremos más o menos igual. Así que es difícil”, concluyó.