El GP de Miami vio al neerlandes Max Verstappen ganar la carrera tras haber arrancado en el noveno puesto de la parrilla. El dos veces campeón del mundo estuvo intratable, dejando atrás rápidamente a sus demás competidores.
A nueve vueltas del final, Max se encontró en la segunda posición, solamente por detrás de su coequipero Sergio Perez. El mexicano inició la carrera con neumáticos medios para mantener la pole en el arranque, eventualmente cambió a duros tras 20 vueltas al circuito.
El actual líder del campeonato salió desde la novena posición con duros y fue hasta la vuelta 46 que entró a pits por un set de medios frescos. Con neumáticos más suaves y con menos desgaste, Verstappen pasó al mexicano con facilidad.
Después de la carrera, se cuestionó si el neerlandés ganó la carrera por la estrategia diferente que implementó la escudería austriaca, que le permitió llegar en mejores condiciones a la recta final.
Christian Horner, CEO y director del equipo, rechazó esta teoría diciendo que Verstappen hubiese ganado con la misma estrategia que Pérez debido al nivel y la forma que mostró.
“Creo que si hubiera estado en la otra estrategia, el rendimiento habría sido muy similar hoy. Creo que estaba frustrado consigo mismo después de la calificación, porque cometió un error y no tuvo la oportunidad de rectificar, creo que tenía confianza al llegar a la carrera de hoy, y sólo quería hacer algo ligeramente diferente”.
Horner posteriormente habló de Checo, indicando que debería estar satisfecho con la segunda posición.
“Creo que son vaivenes del deporte, ¿no? Hace una semana estaba en lo más alto. Pero no creo que esté muy decepcionado. Se lleva 18 puntos de aquí. No creo que haya nadie que hubiera vencido a Max hoy”.