El inicio del Gran Premio de Australia fue caótico. Fue en la largada que Ferrari perdió a Charles Leclerc tras un choque en la curva 3, dejando al monegasco fuera de la carrera.
La carrera tuvo el primer safety car, donde Lance Stroll y Leclerc se dieron un toque en la parte delantera del monoplaza, dejando al de Ferrari con la peor parte, pues perdió el control del auto y se derrapó fuera de la pista.
Leclerc no pudo regresar la carrera, teniendo que ser retirado su auto, mientras que Stroll quedó en cuarto, sin mayor complicación.
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