Zurdo Ramírez sólo amagó con regresar al boxeo porque su intención nada más quedó en eso, al no dar el peso requerido para su velada ante Gabriel Rosado, un rival que se quedó con las ganas de intercambiar golpes con el ex campeón de la Organización Mundial de Boxeo de los supermedianos.
El ex retador de Dmitry Bivol quedó al menos ocho libras por encima de las 175 libras que estipulan los semipesados. De inmediato las críticas cayeron para Gilberto Ramírez, quien publicó un mensaje de redes sociales en el que muestra su intención para bajar el peso señalado y, sobre todo, comprometerse para que esto no vuelva a suceder.
Zurdo Ramírez cancela su pelea con Gabriel Rosado
“Sin excusas. Nunca he fallado en dar el peso en las en mis 45 peleas profesionales. Esta es la primera y la última vez”, explicó el boxeador de las 175 libras a través de un comunicado de prensa.
Zurdo Ramírez ni siquiera se atrevió a subir a la báscula. Algunos reportes de medios internacionales señalan que el mexicano estaba 12 libras por encima durante la mañana del pesaje, razón por la cual el ex campeón mundial prefirió declinar a su pelea al ver que no podía bajar las ocho libras restantes.
“Siempre me he enorgullecido de ser un profesional, pero hoy no fue mi mejor momento. Con eso dicho, quiero disculparme con todos los fanáticos y que me apoyan”, sostuvo Gilberto Ramírez mientras se disculpaba con su promotora y con la plataforma de pago por evento que lo respalda.
Gilberto Ramírez, arrepentido al no dar el peso
El peleador azteca viene de una derrota con Dmitry Bivol, el ruso que le quitó el invicto en sus 44 peleas previas, todo gracias a los desplantes que hizo dentro del ring el campeón de la Asociación Mundial de Boxeo, los cuales evitaron que el mexicano pudiese alcanzarlo. El campeón de los semipesados lo recibía en contragolpes constantes para dejarle la peor pelea de su carrera.
Gabriel Rosado, compañero de entrenamientos, consiguió la oportunidad de pelear contra un Zurdo Ramírez dolido, pero ahora tendrá que esperar a que su posible rival baje de peso.
“Nunca me rindo al intentar dar el peso, cortando hasta el último momento, pero no pudo perder lo suficiente para cumplir con el peso pactado. Estoy avergonzado y decepcionado de mis decisiones y prometo que esto nunca sucederá de nueva cuenta. Haré los ajustes correctos.