Jake Paul y Nate Diaz se verán las caras este próximo 5 de agosto en el American Airlines Center de Dallas, Texas, día en el que el influencer tendrá su prueba final dentro del boxeo en su intento de meterse dentro de la conversación tras las críticas que lo rodean debido a que existen aficionados que todavía cuestionan su capacidad sobre el cuadrilátero.
El creador de redes sociales entrará al ring en una pelea pactada en las 185 libras, una división que maneja muy bien el rubio ante un Nate Diaz que incursionará dentro del boxeo tras un largo paso como competidor de las artes marciales.
Jake Paul tiene la presión sobre su espalda debido a que viene de una derrota ante Tommy Fury en un encuentro gris y opaco para ambos boxeadores puesto que calentaron tanto la pelea que los aficionados quedaron decepcionados por el encuentro del 26 de febrero pasado en Arabia Saudita.
La pelea de aquella noche acabó en decisión dividida en favor del hermano de Tyson Fury, el campeón del Consejo Mundial de Boxeo de los pesos pesados. Si bien para los jueces, el encuentro fue parejo, al final del día los dos boxeadores mostraron sus debilidades al ataque en un choque de pocas emociones.
Jake Paul ostenta un récord de 6-1 y aunque al principio el rubio presumía un récord invicto previo a su pelea con Tommy Fury, los cuestionamientos no tardaron en llegar debido a que más de uno criticó que el influencer no había peleado con boxeadores profesionales.
Dentro de las victorias del creador de contenido digital destaca un KO impresionante sobre Tyron Woodley, un ex campeón de peso wélter de UFC durante el sexto capítulo de su pelea a mediados de diciembre del 2021. El problema es que el hermano de Logan Paul sigue sin dar el salto a peleas ante boxeadores profesionales.
El mismo Consejo Mundial de Boxeo, a través de su presidente Mauricio Sulaimán, estaba de acuerdo en poner a Jake Paul en el ranking de los pesos cruceros si vencía a Tommy Fury a principios de este año, pero tras la derrota la carrera del youtuber quedó congelada a la espera de volver a meterse a la conversación con una victoria sobre un Nate Diaz, quien viene de anunciar su retiro en la MMA. La última prueba del rubio estará en juego este fin de semana, pues queda la duda si una derrota podría hundir su carrera.