Tener una temporada apenas 2 juegos arriba de .500 tras 80 partidos no es nada para echar campanas al vuelo, pero es la mejor desde 2016 para los Angels de Los Angeles, que pese a tener a dos de las más grandes estrellas del béisbol, no juegan en la postemporada desde el 2015.
2023 era un año vital porque el fenómeno Shohei Ohtani, estaba en su último año antes de ser agente libre. El no contender los primeros cinco años de su carrera en MLB aumentaba el fuego de los rumores de que el japonés buscaría nuevas latitudes la próxima temporada.
Los Angels mejoraron el equipo y hace cosa de tres semanas, el 18 de junio, iban con marca de 41-33, en control de un boleto de comodines en la Liga Americana tras ganar 11 de los últimos 14, pero todo se ha derrumbado.
Tienen marca de 4-10 desde entonces (45-43 antes del juego el miércoles ante los Padres), están a 4 partidos del último comodín del Joven Circuito. Para colmo de males, Mike Trout se rompió la mano y perderá al menos un mes, y esto podría llevar a los Angels a cambiar el rumbo y decidir cambiar a Ohtani.
La dirigencia del equipo ha dicho que el plan era mantener al japonés pasara lo que pasara, por más que existe el riesgo que se vaya gratis en el invierno del 2023. Eso sí, siempre estaba la sombra del 1 de agosto, con la fecha límite de cambios, que se suma a las lesiones de Trout y Rendon y el alejarse de la postemporada para conjurar la fórmula que podría hacer cambiar de opinión.
No hay un equipo que no quisiera tener al jugador que pudo tener el mejor mes de la historia de la pelota (que el jugador quiera ir o puedan pagarle, es otra historia). Ohtani bateó para .394, siendo el líder en porcentaje de embasado con .492, home runs, carreras producidas y otras estadísticas más de ofensiva, además de que lanzó 30.1 entradas, con 3.26 de efectividad.
Pretendientes no van a faltar. Los Giants, al no hacerse con Aaron Judge, tienen el capital disponible y Ohtani prefirió siempre la Costa Oeste por la hora en que se ven los juegos en Japón. Dodgers y Yankees siempre estarán dispuestos a buscar estrellas y Nueva York, en concreto, está urgido de ofensiva. Mets y Boston eran otros destinos populares, pero tienen el mismo problema de estar del otro lado del mundo. San Diego, si quieren creer que no están tan lejos de Playoffs, no se ha mostrado tímido en el deadline los últimos años. También están los Marineros de Seattle, con el Factor Ichiro a su favor
El paquete de prospectos y selecciones podría ser el más grande de la historia. Eso es lo que tiene que ponderar los Angels, porque miran al precipicio de otra temporada perdida y un cambio radical para 2024 sin el mejor jugador del béisbol, quien se podría ir gratis y sin nunca haber jugado la postemporada con los halos. Al menos rescatarías algo con el cambio.